Yacimiento Arqueológico de Oreto-Zuqueca

DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS FORMAL

Es un amplio complejo arqueológico, Oreto-Zuqueca, que se extiende por el Cerro del Obispo y el Cerro de Oreto o Domínguez, además de por la vaguada entre ellos.

Se localiza a poco más de 4 km al sureste de Granátula de Calatrava. En el Cerro de Oreto hay murallas, torres, calles, viviendas y urbanismo; aunque hay indicios de presencia prehistórica, el origen como hábitat ibérico, oretano, está en el s. V aC avanzado, fue la capital de Oretania.

La zona conoció la romanización y entonces se ocupa la zona de llanura, donde se ha localizado actividad desde el s. I aC., pero sobre todo una fase visigoda con estructuras arquitectónicas de un episcopado, el de Oretum, posible basílica y anexos, baptisterio y otras estancias indeterminadas; también se ha localizado una amplia necrópolis con gran variedad de tipo de tumbas, destacando una con lauda musiva y mención al diácono Aurelius Vincentius; junto a estos restos arquitectónicos eclesiásticos se ha localizado una piscina bautismal y anexos.

En otro cerro, el del Obispo, en el, sector este, hay otra zona de hábitat igualmente fortificado, quizá con inicios prehistóricos, que parece tardorromano y de fase igualmente goda.

Los edificios godos muestran al menos dos fases cronológicas, una de entre el siglo V y el VI y otra del s. VII, siendo notable la existencia de más de 50 elementos de escultura arquitectónica goda y spolia de estructuras romanas anteriores, época de la que existe un importante vado del río Jabalón, que disponía de un importante puente romano, todavía visible parcialmente, mandado construir por Publio Baebio Venusto (fin s. I – inicios II dC.); desde el s. VIII se transforma en una temprana población islámica, entre cuyo urbanismo se ha documentado el hammam más antiguo de al-Andalus; se distinguen construcciones de dos etapas islámicas, en las que parece dispuso de una zona palacial; con la conquista cristiana formara parte de la Orden de Calatrava, siendo sede de un priorato y dando paso a una profunda remodelación de la arquitectura medieval del lugar, desde una fecha temprana del s. XIII. A partir de la fase medieval se han desarrollado diversas obras de remodelación y refuerzo que han permitido que hoy se pueda contemplar la ermita de Nuestra Señora de Oreto y Zuqueca, que alberga la imagen de la Virgen de Zuqueca, mostrando además en la estructura del edificio numerosas piezas arquitectónicas romanas y visigodas reutilizadas en sus reformas.