Colegiata de Saint Pierre y Saint Gaudens

DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS FORMAL

La zona ya estuvo poblada en la Edad del Hierro y, después, en el periodo romano. En el territorio se erigió la ciudad de Lugdunum Consorarum.

Durante el siglo V corresponderá al territorio del reino visigodo de Tolosa y una leyenda habla del pastor Gaudencio, capturado y decapitado por un soldado godo por no renegar de su ortodoxia católica frente a la fe arriana  del godo. Más tarde el territorio pasaría al estado franco. Fue a finales del siglo XI el obispo de Comminges crea una comunidad de canónigos.

En el siglo XI se erige una basílica de tres naves y tres ábsides, sin crucero, sobre indicios de un edificio anterior. El obispo de Comminges, Bernardo, impulsa la obra. La colegiata está dedicada a la advocación de San Pedro y San Gaudencio. El primer estilo románico de los siglos XI-XII será completado con un claustro y una sala capitular del siglo XIII, la portada norte, en estilo gótico flamígero, ya en el siglo XVI. La colegiata de Saint Pierre se construye a fines del siglo XI, en estilo románico, sobre restos de un edificio anterior, según la tradición. Consta de una planta basilical de tres naves, sin crucero, rematadas en tres ábsides. La nave central tiene una cubierta de bóveda de cañón. Sobre las naves laterales se intentó construir unas galerías para que fuese una iglesia de peregrinación, pero quedó inconcluso. La torre-campanario mide 45 m de altura y tiene 36 campanas, destacando la llamada Gaudense, con más de 1.100 kg de peso.

La nave central presenta una bóveda de cañón y es más alta que las laterales; sobre ellas se planificó la construcción de galerías para transformar la colegiata en una iglesia de peregrinación, pero el proyecto no se finalizó. El claustro se inició hacia la segunda mitad del siglo XII y se concluyó a mediados del siglo XIII.  La decoración escultórica presenta claras influencias de talleres de Jaca. La galería norte destaca por la labor delicada de sus capiteles, con hilos entrelazados, decoración vegetal, animal, humana y escenas bíblicas. Uno de los capiteles muestra a un colegio apostólico (los Apóstoles), presididos por San Pedro, titular de la Colegiata. Otros capiteles representan la tentación de Adán y Eva y la expulsión del Paraíso, con una composición muy simétrica, con Adán a un lado, Eva al otro y en el centro el árbol en el que se enrosca la serpiente. El claustro fue desmontado a principios del siglo XIX y reintegrado a finales del siglo XX (a partir de 1987) con piezas originales conservadas y copias de otras conservadas en museos y colecciones particulares.

La sala capitular, obra del siglo XIII, es de estilo gótico, con un pilar central y una imagen de San Miguel en la entrada.

Durante las guerras de religión la colegiata fue incendiada por los hugonotes de Montgomery (1569). La Revolución Francesa desacralizó el edificio y lo vendió, pero en 1804 se restauró el culto. Antes el claustro había sido expoliado de parte de sus materiales y el resto fue desmontado. En el siglo XVII se incorpora el órgano (Monumento Histórico desde 1971) y en el siglo XIX comienza la restauración del edificio, incluyendo la torre-campanario.

La colegiata de  Saint Pierre et Saint Gaudens cuenta con un órgano del siglo XVII, declarado Monumento Histórico en 1971. También cuenta con una serie de tapices de mediados del siglo XVIII, obra de Aubusson con temas como el Triunfo de la Fe (inspirado en un cuadro de Rubens conservado en el Museo del Prado), el Martirio de Saint Gaudens o la Transfiguración de Jesús en el monte Tabor en presencia de Pedro, Santiago y Juan, con aparición de Dios Padre en una nube y Moisés y Elías. Dos de estos tapices fueron robados de la colegiata en 1989 y localizados en una subasta de arte en Nueva York seis años después. En 1976 se descubrió en un vertedero un relieve con la Virgen y el Niño del siglo XII, realizado en mármol blanco de Saint Beat.

FRANCISCO JAVIER FERNÁNDEZ GAMERO